top of page
Buscar

LA PARADOJA DE LA FRUGALIDAD

  • purifalcantara
  • 21 may 2021
  • 4 Min. de lectura

¿Sabes qué es la paradoja de la frugalidad? Menuda palabreja ¿no te parece? Pero si te digo que es lo mismo que la paradoja del ahorro ¿a que quizás te suena un poco más?


Bueno, tanto si te sonaba, como si se trata de un concepto totalmente nuevo, que escuchas por primera vez, aquí estoy yo para sacarte de dudas. Y, además, te vas a dar cuenta de que es algo que sucede muy a menudo y que seguro te ha tocado vivir de cerca.


La Paradoja de la Frugalidad, también conocida como Paradoja del Ahorro, es un principio de la economía keynesiana que demostraba, a través de diversas fórmulas, cómo el ahorro en una economía capitalista puede llevarnos a agravar las crisis económicas que se viven.


¿Y esto qué quiere decir? Pues que todos y cada uno de nosotros, con nuestra manera de actuar afectamos directamente al funcionamiento de la economía de un país, aunque pensemos que los máximos responsables del funcionamiento de la economía son nuestros dirigentes políticos.


Empecemos por el principio.


Para entender bien de lo que te hablo, empecemos por el principio y con unos términos que podamos entender todos.


Cuando se dice que las cosas en economía van mal o que estamos atravesando un momento económico malo, nuestro primer instinto siempre es el ahorro y tratar de gastar lo mínimo posible, por un miedo injustificado a que se avecinen tiempos peores. Y es que, el ser humano, es así de pesimista y expresiones populares como: “Siempre se pude estar peor”, reflejan esa tendencia natural a pensar que el futuro es incierto y poco esperanzador.


Pero y ¿de qué manera afecta a la economía realmente esta tendencia natural de ahorrar por lo que pueda pasar? Pues de una manera muy negativa, porque, aunque no lo creas, este comportamiento replicado en todos y cada uno de los ciudadanos de un lugar tiene efectos muy negativos en la economía de un país, que se hacen notar en poco tiempo.


El resultado de esta actitud generalizada conlleva que cuanto más ahorremos, menos gastamos. A priori, esto puede sonar comprensible y hasta diría que sensato ¿no? Ya que del total de nuestros ingresos solo existen dos caminos posibles: gastar o ahorrar.


Por lo tanto, si ahorramos, no gastamos. Y ¿qué ocurre si no gastamos? Pues sucede lo peor que le puede pasar al motor económico de un país y es que si no hay demanda de productos o servicios el país, más pronto que tarde, se paraliza.


Si deja de haber demanda de productos o servicios, las empresas se ven obligadas a reducir sus costes y esto conlleva en la mayoría de los casos, deshacerse de buena parte del personal contratado. Y a su vez, ese personal que ha sido despedido tomará la misma actitud general que el resto de los habitantes de esa economía, ya que viendo que han perdido su principal fuente de ingresos, se dedicarán a ahorrar y a no gastar por si no se llega a recuperar la economía o por si ellos no vuelven a encontrar un empleo en el medio o largo plazo


¿QUÉ OCURRE CUANDO GASTAMOS?


Lo primero que va a suceder es que se necesitará más personal para cubrir esa demanda de consumo y, por lo tanto, habrá menos gente en el paro y más gente gastando y consumiendo.


Nos encontramos frente a la típica situación que nuestro diccionario de frases populares describe como: "El pez que se muerde la cola". Si no gastamos, hay menos demanda. Y con menos demanda habrá más desempleo y esta ecuación se puede perpetrar hasta el infinito si no revertimos la situación en algún punto.

Quizás a estas alturas te preguntes ¿qué tiene que ver todo esto contigo? Pues tiene que ver y mucho. Porque tras un año repleto de ERTES, confinamientos, estados de alarma, y demás, más allá de esperar que nuestros dirigentes solucionen la situación, debemos de ser, también, nosotros quienes hagamos un esfuerzo y empecemos a reactivar la economía.


Con esto no estoy diciendo que nos pongamos todos a gastar a lo loco, ni pretendo entrar en polémicas sobre quién puede salir más o menos beneficiado con esta situación. Si ya me vas conociendo por lo que publico en mis redes sociales, mi objetivo final es ayudar a las personas a que aprendan a planificar y gestionar mejor su economía doméstica o de su empresa, para que en momentos difíciles como los que hemos vivido, hayan sabido tener un colchón financiero, generado un ahorro de forma sistemática, pero que les haya permitido seguir consumiendo para contribuir a esa activación de la economía, y todo ello gracias a mi #fórmulaEXCELente de planificación financiera.


Así que, quiero que te quedes con la idea de que todos podemos poner nuestro granito de arena para reactivar la economía de un país consumiendo y demandando los servicios que nos ofrece y volviendo a hacer turismo, eso sí, con todas las precauciones.

Quiero que pienses en lo que puedes hacer tú, y no que esperes a que los demás hagan algo. Hagamos uso de la responsabilidad que nos corresponde. Usemos los servicios, vayamos a los restaurantes, desayunemos en los bares y cafeterías, volvamos a viajar dentro de nuestro país, porque es algo que todos necesitamos.

Por todo esto, voy a ir compartiendo con vosotros una serie de artículos y publicaciones en mis redes sobre como viajar barato. Porque como ya he dicho antes, no se trata de gastar a lo loco y no ahorrar, sino, cómo planificándonos de una forma #EXCELente podemos gastar dentro de nuestras posibilidades y sin olvidarnos de algo tan importante como es el ahorro. Pero un ahorro mesurado, con cabeza, sin excesos que puede llevarnos a romper nuestra economía.


¿Me acompañas en este viaje?


 
 
 

ความคิดเห็น


  • Instagram
  • Facebook
  • LinkedIn

©2021 by Puri Fernández.  Creado con ilusión y muchas ganas.

bottom of page