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¿CÓMO PLANEAR UNAS VACACIONES #EXCELentes?

  • purifalcantara
  • 8 jun 2021
  • 12 Min. de lectura



ELIGE VIAJAR EN TEMPORADA BAJA


Es innegable que la temporada baja de muchos destinos siempre es mejor. Pero también es cierto que, aunque cada vez más empresas le permiten cierta flexibilidad para tomar vacaciones a sus empleados, la gran mayoría tenemos vacaciones en agosto y Navidad por lo que encontrar buenas ofertas en esas fechas concretas se hace más difícil.

Por otro lado, si lo que te gusta es disfrutar de la playa y poder bañarte en el mar, por barato que te salga el viaje en pleno invierno no vas a poder hacerlo, salvo que quieras pillar un buen resfriado.


Pero ¿se puede hablar de temporada baja así en general? Pues no. Porque cada lugar tiene su propia temporada baja, por eso, es imprescindible que te informes de cuándo es la temporada baja del destino en el que estás pensando y te lo digo por experiencia propia.


Por ejemplo, el mes de agosto es temporada baja para Egipto, básicamente porque por esas fechas se pueden alcanzar los 50 grados a la sombra y eso es algo para tener en cuenta. No obstante, eso no fue un impedimento para mi familia y para mí y disfrutamos ese viaje muchísimo y a un precio fantástico 😊


VUELOS BARATOS




No voy a hablar de las generalidades obvias que todos más o menos podemos conocer, pero sí de aquellas que no son tan conocidas o que al menos marcan la diferencia.


No sé si tú también has oído eso de que los martes es el mejor día de la semana para buscar vuelos. Si no lo sabías ahora ya lo sabes. Pero también es cierto que cuando las compañías aéreas sacan sus ofertas de vuelos, estas no varían en función del día de la semana. Así que, como ves, esto no siempre se cumple y ya te adelanto que en fin de semana también se pueden encontrar vuelos baratos. Por lo tanto, no te cierres a un día en particular para buscar vuelo, lo cual tiene mucho que ver con otro punto que te comentaré en seguida relacionado con ser flexible con las fechas.


Lo que sí que es totalmente cierto, es que volar en fin de semana suele ser más caro, pero como te explicaba al comienzo de este artículo, disponer de días libre en tu empresa entre semana es más complicado que un viernes o un lunes, por lo que al final no deja de ser un fin de semana largo.


SÉ FLEXIBLE CON LAS FECHAS


Por tonto que te parezca la diferencia de precios puede ser absolutamente escandalosa. Por ejemplo, mientras escribo este artículo he realizado una búsqueda al azar de vuelos BCN-NY modificando las fechas. Y el resultado es que el mismo trayecto saliendo el domingo 25 de julio cuesta 833€ y saliendo el lunes 26 de julio el mismo vuelo vale 374€. ¿Merece o no merece la pena ser flexible con las fechas?


EL TRUCO DE LOS TRUCOS




Cuando yo descubrí este truco empecé a entender muchas cosas. Pero para eso tengo que explicar bien qué son las cookies.


Las cookies son unos ficheros que se descargan en todos nuestros dispositivos (ordenador, tablet, teléfono móvil) cada vez que accedemos a una página web para buscar información sobre algo, por ejemplo, buscar un vuelo, un hotel y pulsamos sobre el botón “aceptar cookies”.


Pero ¿qué ocurre cuando le damos a aceptar cookies? Esto permite a los sitios web que visitamos poder almacenar y recuperar nuestra información sobre las páginas por las que hemos navegado.


Existen diferentes tipos de cookies. Por un lado, están las cookies técnicas que son imprescindibles para el correcto funcionamiento de una página web y para mejorar la navegación. Pero existen otras que son utilizadas con el único objetivo de ofrecer publicidad adaptada a nuestros gustos, intereses y búsquedas y que se conocen como cookies de terceros o cookies publicitarias, así como para identificarnos (cookies de sesión) o para evitar el uso fraudulento de nuestras contraseñas por parte de terceros (cookies de seguridad).


La Ley de Servicios de la Sociedad de la Información (LSSI) y la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) distinguen claramente entre las cookies técnicamente necesarias y las que no lo son. Las primeras pueden guardarse sin previa autorización del usuario, mientras que las segundas sí necesitan de nuestro consentimiento y por eso nos sale siempre la preguntita de ¿quieres aceptar las cookies?


Así que ya sabes lo que estás haciendo cada vez que le das a aceptar.


Y ¿qué tiene esto que ver con buscar vuelos y hoteles para ir de vacaciones? Pues tiene que ver mucho, porque el simple hecho de no aceptar las cookies, o de buscar con pestañas de incognito o de borrar las cookies de la memoria caché cada vez que haces una búsqueda, hará que puedas encontrar mejores ofertas en tus vuelos. Ya que si la web detecta que has buscado un mismo vuelo 3 veces automáticamente va a subir el precio o va a hacer que no encuentres la oferta con la que te enganchaste, haciéndote pensar que simplemente tardaste demasiado en reservar un vuelo. Y no, lo que pasa es que ya se percataron de tu interés por ese vuelo.


¿Está mal eso? Sí. Pero ¿es legal que las compañías lo hagan? También.


Así que lo mejor que puedes hacer es seguir mi consejo. Existen cientos de tutoriales por internet donde te enseñarán como borrar las cookies con facilidad.


NO TE CASES CON NINGUNA COMPAÑÍA.


Las compañías aéreas lo que quieren es que repitas volando con ellos una y otra vez, por eso salen los planes de puntos, beneficios y demás, para conseguir fidelizarte y que te quedes con ellos para toda la vida. Pero eso no quiere decir que hacer la ida y vuelta con la misma compañía sea lo mejor para tu bolsillo.


De hecho, yo he comprobado que es justo lo contrario y lo he hecho en más de una ocasión. Volar a la ida con una compañía y regresar con otra totalmente diferente. Puede que te tome más tiempo, sí, pero realmente ahorras mucho dinero y yo siempre te hablo de planificar tus viajes con tiempo así que una vez que estás acostumbrado a organizar tus vacaciones con mucha antelación esto no te va a suponer un problema, sino todo lo contrario.


LA TRAMPA DE LOS AEROPUERTOS, LAS DISTANCIAS Y LOS HORARIOS.



Y digo la trampa porque son aspectos que muchísimas personas pasan por alto. En cuanto a la distancia, lo normal es aconsejarte que busques vuelos a aeropuertos cercanos, pero esto también puede ser un poco arriesgado. Y nuevamente te hablo desde mi experiencia.


En mi caso, yo vivo en Barcelona, y nos puede salir más barato volar desde Reus o desde Girona. Pero también hemos de contar el tiempo que nos toma desplazarnos al centro de Barcelona y el coste del tren. Puesto que no vale lo mismo el tren del Prat a Barcelona que el tren de Reus a Barcelona. Y este aspecto lo debes tener en cuenta en las ciudades a las que te desplaces.


En definitiva, salir de un aeropuerto u otro o llegar a un aeropuerto determinado te puede salir más barato, pero tienes que contar con el coste que supondrá desplazarte hasta ese aeropuerto en caso de que físicamente esté más lejos y si los medios de transporte llegan hasta allí


En cuanto a los horarios, si cuando salgas o aterrices no hay transporte público tendrás que buscar desplazamiento particular como un taxi, donde, además, te cobrarán un recargo por equipaje.


Cuando elijas un aeropuerto u otro estarás aplicando el coste por distancia. Y cuando elijas volar a una hora u otra estarás aplicando el coste de no disponer de transporte público en caso de ser entrada la noche o antes del amanecer.


FACTURAR O NO FACTURAR ESA ES LA CUESTIÓN



Efectivamente, para muchos viajes es totalmente innecesario facturar maleta. Y, para aprovechar al máximo el espacio de las maletas y mochilas de mano que puedes subir al avión hay miles de videos en Youtube de cómo doblar la ropa para que ocupe menos espacio. Lo sé, porque me los he debido de ver todos jajaja 😊


De lo que sí debes estar muy pendiente es del peso de la maleta o mochila en cuestión. Normalmente, la maleta de mano no suelen pesarla, pero por si acaso es mejor no arriesgarse. El truco que uso yo para pesar las maletas es muy rudimentario, pero a mí me funciona y es el que siempre recomiendo. Usa la báscula de toda la vida.


Primero te pesas vestido, sin maleta ni nada y anotas tu peso. Y después, te vuelves a pesar con la maleta y sacas la diferencia restando los pesos. ¿Por qué hago esto? Pues porque las básculas caseras tienen un margen de error bastante amplio y es más sencillo que después en el aeropuerto puedan pesar lo mismo que tú has calculado en casa. A mí desde luego nunca me falla y siempre estoy acertada con los pesos.


Y si son vuelos con maletas para facturar, esas sí que las van a pesar en el aeropuerto, sí o sí y las maletas grandes cuesta mucho más pesarlas en las básculas de casa y por eso el truco de la báscula es el que mejor te va a funcionar.


Y mucho ojito, porque si te preocupa el peso de tu maleta en el viaje de ida, este asunto se complica más en el viaje de vuelta, porque a lo que ya llevábamos hay que sumarle, regalos, souvenirs, y ropa que quizás compramos por imprevistos. Un abrigo porque hizo más frío del pensado, un paraguas porque nos llovió…



En mi caso particular tengo un problema con cierto tipo de souvenir que siempre compro en cualquier viaje que haga. Se trata de las típicas esferas de adorno, que son de cristal, que llevan agua y purpurina o nieve dentro con figuritas típicas del país visitado y que mi hija colecciona.


En más de una ocasión han sido motivo de polémica en el aeropuerto porque la persona que ha registrado mi maleta las ha considerado sospechosas por el hecho de llevar líquido en su interior, como me ocurrió en Oslo, pero en esa ocasión, finalmente me la dejaron llevar.


Recuerda que no se pueden llevar más de 100ml en la maleta de mano por lo que si es una esfera más grande me toca facturar.


Y la segunda vez, fue en el aeropuerto de Liverpool. En esa ocasión no me dejaron traer la bola por considerarla un riesgo para el personal del aeropuerto.


Ya sabes que una de las cosas te recomiendo con mi #fórmulaEXCELente es que no compres en las tiendas de souvenirs en tus viajes, porque suelen ser caros, pero hay colecciones, vicios, caprichos, como en este caso concreto, que hacen que yo no lo aplique, porque voy buscando un objeto en particular que no encuentro en otro lugar.


CONVIERTE UNA ESCALA EN UN VIAJE EXPRESS


Sí, lo admito, las esperas en los aeropuertos pueden ser de lo más pesadas sobre todo si vienes viajando del otro lado del charco y lo único que quieres es llegar a destino. Peeeeero, desde hace algunos años he descubierto que las escalas bien organizadas pueden significar un viaje express a una ciudad que de otra manera nunca hubieras tenido tiempo de visitar. Y de nuevo la clave está en una planificación #EXCELente.


Así que si no tienes miedo de experimentar una escala de 12 horas cambia el chip y míralo como una excelente oportunidad para hacer turismo.


De hecho, no es tan loco lo que te planteo pues ya empieza a haber aeropuertos que facilitan una visita turística organizada a la ciudad para los pasajeros que hacen escala en sus aeropuertos. Llámame loca, pero yo me apunto 😊


PREFIERE SIEMPRE LAS ENTRADAS ONLINE


Comprar las entradas de cualquier visita turística por adelantado es más barato que comprarlas físicamente en las taquillas del lugar. A veces por la cola que te toca hacer y otras veces porque el precio allí va a ser más caro.


Mi recomendación es que antes de entrar en ningún sitio compruebes el precio por internet. Lo suyo, es que lleves las entradas de cualquier visita programada, compradas con antelación, pero en caso de no haber podido acude siempre a internet.


Incluso puedes comprarlas por la noche en el hotel el día de antes mientras planificas la visita. Por ejemplo, cuando fui a Sevilla, había mucha cola para sacar unas entradas y finalmente las compré por internet mientras hacia la fila.


Ahora, por la situación actual en la que estamos en muchos sitios no te van a vender las entradas físicamente si no las has reservado antes por internet.


LAS TARJETAS DE VIAJES


Si no sabes de lo que te hablo me refiero a tarjetas como BrusselsCard, Berlin Pass, Hola Barcelona y otras similares que te ofrecen pases y descuentos para algunas actividades. Debes de informarte muy bien de cuáles hay disponibles en la ciudad que vas a visitar y qué condiciones te ofrecen.


Suelen ser pases de 2-3-4-5 o 7 días para visitar las ciudades. Incluyen descuentos en museos, transporte público con descuentos o con viajes ilimitados, etc.... Pero para eso también hay que hacer un trabajo previo de investigación sobre el precio de la tarjeta, lo que vamos a visitar, los viajes de metro/bus que vayamos a necesitar y cuáles son los precios reales en caso de no usarla.


EL PRESUPUESTO




Como profesional de las finanzas puedo asegúrate que el presupuesto es la base de cualquier buena planificación. Y, a la hora de hacerlo, no hemos de olvidar que tenemos que comer, beber, comprar souvenirs, etc... Y todo esto también lo hemos de incluir en el presupuesto.


De la misma manera hemos de tener en cuenta los posibles imprevistos para los que no vamos preparados. ¿Pero si son imprevistos cómo los voy a impedir? Evidentemente no tenemos una bola de cristal para saber qué cosas nos pueden llegar a pasar en un viaje, pero si en nuestro presupuesto hemos destinado un dinero específico para solventar esos imprevistos no habrá nada que nos estropee el viaje.


¿Te quieres creer que en pleno agosto nos llovió en Egipto? Los guías que nos llevaban nos dijeron que llevaban meses sin ver una gota de agua, y por suerte nos pilló en el autobús y no nos mojamos, pero de no haber sido así nos tendríamos que haber comprado un paraguas o unos chubasqueros.


O, por ejemplo, que me pilló una ola de calor en pleno mes de diciembre en Atenas, y tuve que comprarme un poco de ropa más ligera de la que llevaba ¡para no morir deshidratada! Jaja 😊


AEROPUERTOS: MÍRAME Y NO ME TOQUES.


Si no conoces esta expresión lo que te quiero decir es que, básicamente, los aeropuertos están para coger el vuelo y poco más, porque cualquier otra cosa que te plantees hacer te va a costar el triple. Ya sea cambiar divisas o comer un bocadillo prepárate para el susto. Por eso yo siempre cambio las divisas en mi entidad bancaria antes de viajar con varios días de antelación.


Personalmente, en los vuelos largos o los que he cogido a la hora de comer o cenar siempre me he llevado mi bocadillo en el equipaje de mano. Aquí lo que sí que he de destacar es que el aeropuerto de Bruselas tiene una iniciativa que me encantó. Cuando pasas el control de seguridad tienen botellitas de agua solidaria a 1€ que es algo que no he visto en otros aeropuertos. Así que si alguien conoce más aeropuertos que lo tengan que nos deje el dato en los comentarios.


DE CIUDADES VA LA COSA


¿Qué tipo de ciudad vas a visitar? No es lo mismo visitar Barcelona o Nueva York, donde las distancias entre los puntos turísticos son enormes, que viajar a ciudades más pequeñas, en las que, aunque te alejes del centro, sigues estando relativamente cerca del punto turístico y el precio del hotel suele ser bastante más barato.


Pero si estamos en una ciudad grande en la que el transporte público puede ser elevado, el alejarse del centro puede suponer un coste no previsto si no nos informamos bien.


Otro aspecto a tener en cuenta tiene que ver con los restaurantes que eliges. Desayunar, comer o cenar en el restaurante más top y céntrico de la ciudad te va a salir más caro que si te alejas unas cuantas calles. Por experiencia, te digo que puedes comer muy bien y ser atendido con mayor atención y rapidez si caminas unas calles más lejos del centro de la ciudad.


HOTEL ¿SÍ O NO?



¿Para qué queremos reservar un hotel? Si nos vamos a un destino de playa, para unas vacaciones de relax, busquemos un buen hotel donde realmente nos encontremos a gusto. Que podamos pasar varias veces al día, incluso ir a dormir una siesta.


Pero si vamos a ir a una gran ciudad, pensemos que por el hotel vamos a pasar a ducharnos, dormir y como mucho, desayunar. No necesitamos invertir en un hotel tremendo 5 estrellas con Spa, piscina cubierta y gimnasio porque seguramente no lo vamos a usar.


Por lo mismo, te recomiendo que tengas mucho ojo con las "ofertas" de “desayuno incluido” porque en la mayoría de los casos lo que incluyen es el “robo” en el precio. Algunos hoteles te clavan 10€ por persona en cada día de desayuno. Y, justo al lado tienes un bar donde poder desayunar mucho más barato y además disfrutar de algo más típico y lugareño que los bufés que ponen en los hoteles.


En definitiva, estos son algunos de los aspectos que yo tengo en cuenta y valoro a la hora de viajar. Toma aquellos que creas que pueden servirte y si quieres compartir otros conmigo estaré encantada de leerte.


Nos vemos pronto con un nuevo artículo 😊

 
 
 

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